Chicho Mohme y Pepe Graña se apropiaron ilegalmente de América TV y Chávarry tiene evidencias de ello, según Lucar
El 26, 27 y 28 de julio de 2000, el hoy prófugo de la Justicia y expresidente de Perú, Alejandro Toledo Manrique, Carlos Ferrero Costa y David Waisman lideraron –con el respaldo económico de George Soros y el apoyo social de la izquierda peruana– la Marcha de los Cuatro Suyos. Dicha movilización tenía como propósito principal rechazar el fraude que se cometió en la segunda re-elección de Alberto Fujimori.
SEGUNDO ACTO:
El 14 de setiembre de 2000, el régimen autoritario y corrupto de Alberto Kenya Fujimori Fujimori y Vladimiro Montesinos Torres cayó por un Vladivídeo denominado “Montesinos-Kouri”, dicho material multimedia fue entregado por Matilde Pinchi Pinchi a un exagente del S.I.N. (sin nombre) y, éste a su vez, negoció dicha cinta en formato VHS con varios partidos políticos: el único movimiento que aceptó pagarle una elevada suma de dinero fue el Frente Independiente Moralizador (FIM), liderado por Luis Fernando Olivera Vega y Luis Iberico Núñez.
TERCER ACTO:
El mismo 14 de septiembre de 2000, tras haber subtitulado la cinta en forma VHS, los líderes del FIM entregaron una copia a Canal N, medio de comunicación de Pepe Graña. Y, en simultáneo, hicieron una conferencia de prensa en la que propalaron el deleznable acto entre Vladimiro Montesinos Torres y Luis Alberto Kouri Bumachar: a éste último se le ve recibiendo dinero de Montesinos a cambio de renunciar al movimiento Perú Posible (partido con el que había llegado, recientemente, al Congreso) y sumarse a Perú 2000 (partido de Gobierno).
CUARTO ACTO:
Tras la difusión de los Vladivídeos, Fujimori y Montesinos huyeron del país.
QUINTO ACTO:
Las elecciones generales de Perú de 2001 se realizaron el domingo 8 de abril (primera vuelta) y el domingo 3 de junio del mismo año (segunda vuelta). Los dos candidatos que disputaban la casa de Pizarro eran Alejandro Toledo y Alan García. Y, como todos sabemos, en esa contienda resultó como ganador Toledo. (2001 – 2006).
SEXTO ACTO:
Alejandro Toledo, aprovechándose de la indignación nacional, hizo reformas integrales en el Ministerio Público y en el Poder Judicial, poniendo a jueces y fiscales enviciados para hacer y deshacer en Perú. Casi todos creían que con la renovación del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo el Perú iba a caminar por la rectitud. Pero, todo era una pantomima, pues Toledo tenía planes incluso más macabros que Fujimori y Montesinos.
SÉPTIMO ACTO:
Toledo entró a la presidencia y con Olivera iniciaron una cacería de brujas contra todo aquel peruano que haya pertenecido, sin haber cometido delito alguno, al Gobierno y al Estado mientras Fujimori estaba en el mando.
OCTAVO ACTO:
Toledo empieza a “gobernar” y a cometer serios delitos penales que, ahora, lo tienen en calidad de prófugo de la Justicia peruana.
NOVENO ACTO:
Una de las traiciones a la patria, cometido por Toledo y que luego de 18 años nos enteramos fue un robo denominado “América Televisión”, de propiedad de José Enrique Crousillat López Torres.
En este Vladivídeo podemos ver que Montesinos le compra la línea editorial de América Televisión a José Enrique Crousillat, por ese motivo, éste último perdió su canal:
DÉCIMO ACTO:
Después de ver el vídeo Montesinos y Crousillat está más que claro que América Televisión es TERCERO CIVILMENTE RESPONSABLE de los delitos cometidos por sus expropietarios. Simplemente, porque la citada empresa de comunicaciones se benefició de la corrupción y, por ende, tiene que asumir responsabilidades económicas y/o reparaciones civiles millonarias en beneficio del Estado peruano. Idéntico caso al de Odebrecht Latinvest Perú S.A.C., firma protagonista del escándalo de corrupción Lava Jato. Dicha constructora está asumiendo sus responsabilidades económicas y está pagando reparaciones civiles millonarias a Estados Unidos y a otros países de América Latina donde ha operado, entre ellos Perú.
UNDÉCIMO ACTO:
El actual fiscal de la Nación, Pedro Gonzalo Chávarry Vallejos, está investigando el caso de América Televisión y su oscura historia desde el año 2000 hasta la actualidad (2018). ¿Por qué? En el mes de octubre de 2018, la empresa Perú Visión, envió documentación inédita al despacho de Chávarry que, si en Perú se cumplen las leyes con igualdad, Chicho Mohme, extopo de Vladimiro Montesinos, y Pepe Graña, el Odebrecht peruano, no solo perderían la titularidad de América Televisión, sino que también irían a parar a prisión por varios años. Pero, ¿por qué Perú Visión está moviéndose legalmente para quitarle la titularidad de canal 4 (la joya de la corona) a Pepe y a Chicho? Muy simple; Perú Visión, damas y caballeros, es el verdadero titular de las acciones de la Compañía peruana de Radio Difusión (canal 4), pues lo que ocurrió es que Toledo, cegado por la corrupción, el dinero y el poder, se olvidó de Perú Visión y, lo peor es que la propia Justicia peruana, al servicio, en ese entonces, de Perú Posible, no incluyó en el proceso judicial a la indicada firma. Es más, ni siquiera lo notificaron. Por eso, hoy, los verdaderos dueños de canal 4 (Perú Visión) están reclamando un nuevo juicio que enviaría a prisión a los dueños del Grupo El Comercio y el Grupo La República por haber cometido una serie de delitos penales antes de conseguir la titularidad del canal de Pachacámac.
¿Por qué? Ahora se los explico:
Chávarry Vallejos va a plantear que América Televisión sea TERCERO CIVILMENTE RESPONSABLE en los casos de corrupción perpetrados por sus exdueños: los Crousillat. Simplemente, porque ese medio fue usado como instrumento para la campaña de la fraudulenta segunda re-elección de Alberto Fujimori y, además, porque Canal 4 fue la herramienta del delito que a través de su señal ganó varios millones de soles y dólares sucios provenientes de la salita del S.I.N.
América Televisión nunca le pagó –en calidad de reparación civil– ni un solo sol al Estado peruano incluso habiendo hecho tanto daño al país.
"El periodista Nicolás Lucar precisa: pero no solamente eso, sino que el tamaño que se puso de la reparación civil no tenía ninguna correspondencia lógica con el daño producido. Es decir, si se había recibido 10 o 12 millones de dólares, la reparación hablaba 50 millones de dólares. Es decir, una cifra muy por encima de lo que podría considerarse un resarcimiento razonable, pero ¿cuál era el sentido que tenía? Era el valor comercial del canal. Es decir, lo que tenía que ocurrir era que cuando terminara el juicio contra los directivos del canal 4 (América Televisión) y ellos perdieran el juicio, que era más o menos previsible, el canal iba a ser TERCERO CIVILMENTE RESPONSABLE, y el Estado iba a recuperar por esa vía la titularidad del canal 4 e iba a ocurrir, ¿no es cierto? Por otro camino lo mismo: la reversión al Estado de esa licencia".
DUODÉCIMO ACTO:
Pero Alejandro Toledo, tenía planes de ser broadcaster y quiso (en el año 2000) ser accionista mayoritario de América Televisión y para llevar a cabo ese propósito urdió un maquiavélico plan.
Año 2000: crisis en Perú, crisis en todos los medios de comunicación del país. América Televisión, luego de la difusión de los Vladivídeos, estaba quebrado y con sus propietarios fugados y algunos ya tras las rejas. Canal 4 tenía tres acreedores: la SUNAT, TELEVISA y el BANCO WIESE. Repetimos, Toledo, deseaba ser accionista mayoritario de América Televisión, y, por ello, realiza una reunión en su residencia en Lima, Perú, con el gerente general del Banco Wiese Sudameris, Eugenio Bertini Vinci, asistente asiduo de la salita del SIN, como Chicho Mohme, para que éste le explique a Montesinos cómo sacar su dinero a paraísos fiscales (Gran Caimán).
Incluso, Bertini habría puesto a disposición a uno de sus hombres de entera confianza para que se realicen los propósitos de Vladimiro. Sin duda, solo ese accionar significaba cárcel para Bertini Vinci por el delito de lavado de activos y el cierre inmediato del Banco Wiese Sudameris.
Prácticamente, Toledo, dueño del Perú, del Ministerio Público y del Poder Judicial, lo tenía en las cuerdas. Lucar narra: «Entonces, a Alejandro se le ocurrió proponer un trato al citado gerente: “ayúdame a declarar en insolvencia canal 4 (en otras palabras, condóname la millonaria deuda) y, además, entrega tu acreencia a alguien a quién yo elija y tú quedas limpio de polvo y paja. Bertini aceptó el trato y el indicado banco solicitó la insolvencia de América Televisión y le entregó mágicamente la acreencia [de millones de dólares] a Gustavo Mohme Seminario, conocido también como Chicho Mohme, topo de la prensa nacional, en la época de Montesinos, según declaraciones del propio Doc»
En resumen, Chicho Mohme, se convirtió de la noche a la mañana en multimillonario y sin pagar ni un solo sol al Banco Wiese se hizo del 33 % de las acreencias que, luego de unos años, se convirtieron en el 33 % de las acciones de América Televisión. Toda esta información lo tiene Pedró Gonzalo Chávarry Vallejos.
LA PREGUNTA DEL MILLÓN: ¿Quién era el mandamás de INDECOPI mientras Bertini solicitaba y declaraba la insolvencia de Canal 4? César Almeyda Tasayco, brazo derecho de Alejandro Toledo Manrique y quien además entró a la cárcel por varios delitos penales.
DÉCIMO TERCER ACTO:
Pepe Graña, dueño del Grupo El Comercio aún no tenía vela en este entierro. Es importante precisar que en el año 2000 dicho grupo mediático estaba más quebrado que América Televisión. Pero Pepe moría por entrar al grupo de los acreedores de América Televisión, pero para ello tenía que pagar la deuda de América Televisión a la SUNAT. Hasta ahora, no se sabe que pasó, pero sorprendentemente la SUNAT le dio el visto bueno, la luz verde al Grupo El Comercio y pudo entrar al grupo de los acreedores de Canal 4. Pero, Pepe Graña quería más: así que fue por más y se preguntó: ¿Cómo le pagamos la deuda a TELEVISA si estoy quebrado?
Nuevamente, Toledo, apareció en la escena, como intermediario. Alejandro para estas cosas era muy despabilado; pues este expresidente posó su mirada en el Grupo Santo Domingo, corporación de capitales colombianos, propietarios de la cervecería Bavaria., quienes, en ese momento, compraron irregularmente acciones del Grupo Backus, ya que nunca debió de ocurrir ello, pues los que sí tenían derecho y prioridad, según las leyes peruanas y contrato de por medio, eran los accionistas minoritarios del Grupo Polar, quienes denunciaron ese hecho ante los medios y ante las entidades competentes. Este lío acabó en la CONASEV.
LA PREGUNTA DEL MILLÓN: ¿Quién era el mandamás de CONASEV mientras Grupo Santo Domingo y Grupo Polar se agarraban de los pelos y se fallaba a favor del primer conglomerado? Nuevamente, César Almeyda Tasayco, brazo derecho de Alejandro Toledo Manrique y quien además entró a la cárcel por varios delitos penales.
Es decir, Toledo, había armado toda una maquinaria maquiavélica para apropiarse del canal 4, había sacado y puesto funcionarios en instituciones claves para cumplir su misión.
¿Qué creen que ocurrió en CONASEV con el lio entre el Grupo Santo Domingo y el Grupo Polar?
Pasó lo mismo que con Eugenio Bertini Vinci; CONASEV falló a favor del Grupo Santo Domingo, de capitales colombianos: Lucar expresa que Toledo le propuso lo siguiente a los ejecutivos de Santo Domingo: «Yo les doy el pase para que tú seas el accionista mayoritario del Grupo Backus y tú pones el suficiente dinero para pagar la deuda que canal 4 tiene con Televisa y, además, pones el dinero suficiente para que canal 4 funcione (equipos nuevos)» Grupo Santo Domingo aceptó, se pagó la deuda a Televisa, se compraron nuevos equipos y así fue cómo Pepe Graña entró, gracias a Toledo, al grupo de acreedores de América Televisión.
Es decir: ¿César Almeyda Tasayco pasó de INDECOPI a CONASEV para terminar la misión que le habría encomendado Alejandro Toledo, con el objeto de apropiarse de Canal 4? Todo indica que sí.
De esa manera, es como el Grupo El Comercio y el Grupo La República se hacen de América Televisión. Y, claro, ya cuando se consumó todo el plan de Toledo, éste dice: «tranquilos, muchachos, yo he armado toda esta operación, así que me corresponde y me pertenece la mitad de la torta (canal 4)» Fue allí que dichos conglomerados mediáticos le armaron una megacampaña de desprestigio a Alejandro Toledo y a punta de periodicazos (con el tema de las firmas falsas de Perú Posible) tumbaron a Toledo Manrique hasta que éste pida auxilio y diga: “por favor, ya no quiero más, no quiero nada, quédense con América Televisión, pero ya no me jodan, porque la gente está empezando a pedir vacancia presidencial”. Esos grupos mediáticos aceptaron la solicitud de Toledo y nunca más tocaron el tema, hasta hoy. Toledo no se imaginó nunca que sus socios iban a actuar de esa manera. Sin embargo, Toledo siguió haciendo negocios turbios con Pepe Graña, pero ya en otro rubro, la construcción (Graña y Montero).
Finalmente, vale añadir que la Justicia, en el periodo de Toledo, fue, posiblemente, la más nefasta de la historia política del Perú, pues esos jueces y fiscales, de ese entonces, prácticamente, cumplían el rol de sicarios, dado que blindaron, por órdenes de Toledo Manrique, a Canal 4 y no lo incluyeron como tercero civilmente responsable de los actos de corrupción de los Crousillat. Solo los Crousillat fueron obligados por la Justicia a pagar las reparaciones civiles millonarias y el canal quedó limpio de polvo y paja: esa decisión es como si Odebrecht Latinvest Perú S.A.C., no sería tercero civilmente responsable de nada, y los únicos que tienen que pagar la deuda al Estado por concepto de reparación civil fueran Barata y Odebrecht.
CONCLUSIÓN:
Chicho Mohme y Pepe Graña se apropiaron ilegalmente de América TV en el año 2000 y Chávarry tiene evidencias de ello; Chicho Mohme y Pepe Graña podrían, no solo ir a la cárcel, sino también perder la titularidad de América Televisión. Y, precisamente, por eso, los carteles mediáticos están tratando de tumbarse al fiscal de la Nación, Pedro Chávarry.
FUENTE: Tomados de Tiempo 26
Escribe: Suriel Chacòn.
