Candidaturas podrán presentarse hasta el 15 de este mes
¿Sabes qué peruano ilustre recibió Las Palmas Magisteriales?
Ø Es el mayor reconocimiento que otorga el Estado a las personas que han hecho contribuciones extraordinarias a la educación y la cultura
Ø Entre los peruanos que han recibido la condecoración figuran Ricardo Palma, Julio C. Tello, Raúl Porras Barrenechea, Jorge Basadre y Honorio Delgado.
El Ministerio de Educación (Minedu) premiará a los maestros destacados con las Palmas Magisteriales, el mayor reconocimiento que otorga el Estado a las personas que han hecho contribuciones extraordinarias a la educación y la cultura del país y que desde su creación, en 1949, ha sido entregado a más de 2000 profesionales.
Entre los peruanos notables que han recibido esa condecoración en su grado máximo de Amauta figuran el escritor y tradicionalista Ricardo Palma, el arqueólogo Julio C. Tello, el historiador Raúl Porras Barrenechea (todos ellos en forma póstuma), el historiador de la República Jorge Basadre y el psiquiatra y filósofo Honorio Delgado.
Además del grado de Amauta, el Minedu otorga las Palmas Magisteriales en los grados de Educador y Maestro y cada año entrega un máximo de 40 condecoraciones.
Con este reconocimiento honorífico, los condecorados reciben también una bonificación económica mensual vitalicia de S/ 1000 para el grado de Educador, de S/ 1500 para el grado de Maestro y de S/ 15000 por única vez para los amautas.
Las instituciones públicas y privadas que deseen presentar candidaturas para las Palmas Magisteriales 2018 podrán hacerlo hasta el martes 15 de mayo.
Historias ejemplares
Las Palmas Magisteriales también han contribuido a que los peruanos conozcan el trabajo anónimo, abnegado y excepcional que muchos maestros desarrollan día a día en el interior de país sobreponiéndose a las limitaciones materiales de sus centros educativos, algunos de ellos ubicados en zonas remotas o de extrema pobreza.
Uno de ellos es Walter Velásquez Godoy, galardonado el año pasado en el grado de Maestro. Este joven profesor de 30 años usó el dinero que ganó en concursos de ciencia y tecnología para equipar el primer laboratorio experimental de bioquímica en una escuela pública del distrito de Colcabamba, Huancavelica, donde enseña desde hace siete años.
Para promover el gusto por las ciencias, fundó un centro de investigación y creatividad que recibe a estudiantes y docentes de 16 distritos rurales interesados en aprender sobre biología y química mediante un exitoso proyecto denominado “Hojas aromáticas”.
“Los chicos extraen las esencias de las hojas andinas, aprenden sobre procesos químicos y físicos como la destilación, la fusión, a medir la temperatura, el volumen y otros temas. Aunque al principio solo era una actividad experimental, ahora incluso vendemos las esencias de forma artesanal y los chicos pueden llevar algo de dinero a sus hogares”, cuenta orgulloso.
Durante 23 años, y pese a las carencias propias de la educación rural, la ancashina Oliva Ita, reconocida el año 2017 en el grado de Educador, impulsó proyectos ambientales, como un biohuerto escolar y una granja de cuyes, que se convirtieron en espacios de aprendizaje y permitieron hacerle frente a los problemas de desnutrición y pobreza extrema de los estudiantes.
"Cuando tuve la oportunidad de estudiar una carrera no dudé en ser maestra porque solamente sembrando en los niños el amor, la esperanza y la fe podemos construir una sociedad de oportunidades", refiere la educadora orgullosa de su labor.
Oficina de Prensa
San Borja, 10 de mayo de 2018
