El cuerpo de uno de los cuatro indígenas de la etnia asháninka asesinados la semana pasada por presuntos madereros ilegales en la selva peruana (región Ucayali), cerca a la frontera con Brasil, fue recuperado según informó la viceministra de Interculturalidad, Patricia Balbuena.
Las labores de búsqueda de los otros tres cuerpos asháninkas continúan en las inmediaciones de la quebrada Canyanya, próxima al río Putanya, donde uno de los integrantes de la comunidad nativa del Alto Tamaya-Saweto, a la que pertenecían los fallecidos, halló uno de los cadáveres.
A la zona llegaron cuarenta policías en cuatro helicópteros el último jueves, entre los que había una decena de integrantes de la Dirección de Investigración Criminal (Dirincri).
Fuente: EFE.