El jefe de
Administración de la Dirección Territorial de la Policía en La Libertad,
coronel Fernando Vergara García, fue separado ayer de su cargo tras el
escándalo que protagonizó en pleno centro de Trujillo, luego de que su esposa y
su hija lo sorprendieran en un vehículo oficial del Estado, con su subalterna
Cinthya Quintanilla Quispe, a quien acusaron de ser su amante.
El hecho ocurrió la tarde del último jueves en la cuadra seis de la avenida
Túpac Amaru II. Vergara y Quintanilla estaban en el auto de lunas polarizadas
de placa GH-298, sosteniendo un presunto amorío, cuando fueron sorprendidos por
la mujer del coronel, quien lo acusó a gritos de infidelidad.
Inmediatamente, la autoridad policial intentó dar marcha a la unidad con el
fin de escapar de su enfurecida esposa. Sin embargo, ella y su hija se treparon
al vehículo para impedir que este avanzara.
Este hecho llamó la atención de los curiosos, que desinflaron las llantas
del vehículo y colocaron tubos para impedir que este huyera de la zona.
Tras una hora, el coronel pidió ayuda a sus colegas de la Unidad de
Servicios Especiales (USE), que usaron la fuerza para separar a la mujer y a su
hija del auto y, así, permitir que la unidad abandonara el lugar.
El jefe de Inspectoria Regional de la Policía, coronel Alejandro Mazuelos
Ramos, lamentó el hecho e indicó que Inspectoria de la PNP determinará la
sanción que le corresponderá a Fernando Vergara.
Según el régimen disciplinario de la Policía, mantener relaciones
extramatrimoniales que generen escándalo y afecten la imagen de la institución
se sanciona con el pase a disponibilidad de uno a 10 años.
Por otro lado, Mazuelos dijo que los agentes de la Unidad de Servicios Especiales
(USE), que intervinieron en el escándalo serán interrogados pues cometieron
excesos al golpear a la esposa y a la
hija del mal coronel de la Policía Nacional del Perú, que hace quedar mal
parado a esa noble institución policial.