La pequeña María Jesús V.S. (7) jamás podrá borrar de su mente las largas horas de horror en las que fue rehén de Alexander Huayta Ventura (19), sujeto que degolló a su madre con una cuchilla para cortar cartón, delante de ella y sus cuatro hermanos.
Era poco más de la 3:30 am de ayer cuando vecinos de Pamplona Alta, en San Juan de Miraflores, alertaron sobre el hecho sangriento que acababa de ocurrir dentro del centro educativo estatal El Nazareno.
Elvira Elizabeth Salas Collazos (33), guardiana del colegio, había sido asesinada y sus hijos mayores, Jasuri (13) y Luis (9), habían logrado escapar con la menor, Milagros (1), y pedir ayuda. Pero adentro aún se encontraban María Jesús y Lilian (3).
EBRIO DE RENCOR
Cuando la policía cercó el lugar, el enajenado homicida cogió como escudo humano a María Jesús y amenazó con matarla. Dejó libre a Lilian y empezó a “negociar”. Increíblemente, su primer pedido fueron unas cervezas.
“Pidió seis botellas, pero solo le dimos tres. Mientras las bebía liberamos a la menor. Al verse vencido se infirió cortes en las muñecas y luego en el cuello”, contó un agente de la SUAT.
De inmediato, tanto el agresor como los menores fueron evacuados al hospital María Auxiliadora. El cadáver de la mujer fue encontrado en el cuarto que ocupaba en el segundo piso.
¿CRIMEN PASIONAL?
Aunque allegados a la víctima negaron que tuviera una relación con su asesino, la policía informó que este la frecuentaba. “Lamentablemente él aún no puede declarar”, informaron.
VIVÍA EN AREQUIPA
Alexander Huayta vivía en la Urb. Las Esmeraldas, en el distrito Bustamante y Rivero, en Arequipa. Vecinos informaron que tenía una mala vida e incluso estuvo en un reformatorio. Luego su familia lo mandó a Lima para que se regenere en un cuartel.