Los legendarios actores Denzel Washington y Mark Wahlberg protagonizan la explosiva cinta de acción “Armados y Peligrosos”.
Las operaciones encubiertas son uno de aquellos trabajos que puedes temer estar haciendo demasiado bien. En lugar de recibir las felicitaciones de tus compañeros junto a un ascenso con su respectivo aumento de sueldo, los mismo superiores que te ordenaron sumergirte en las entrañas del mundo criminal pueden temer que el acto montado deje de ser tal cosa y efectivamente hallas cambiado de bando.
Y esta es solo una de las preocupaciones. ¿En quien confiar cuando traiciones y mentiras es todo cuanto te rodea? Pues en “Armados y Peligrosos” (2 Guns) Denzel Washington y Mark Wahlberg nos prueban que cuando todos desean matarte, al menos puedes fiarte de quien no te está apuntando (la mayor parte del tiempo).
Basado en el cómic del mismo nombre escrito por Steven Grant y publicado por Boom Studios, esta adaptación a la gran pantalla cuenta con la dirección del cineasta hispano-islandés Baltasar Kormákur, quien pone a su cargo a un elenco complementado por Paula Patton, Bill Paxton, Fred Ward, James Marsden y Edward James Olmos.
Desde hace 12 meses, el agente de la DEA Bobby Trench (Washington) y el oficial naval de inteligencia Marcus Stigman (Wahlberg) trabajan como infiltrados en una organización mafiosa que trafica con drogas, ignorantes de la verdadera filiación de cada uno. Sin embargo, al momento en que sus identidades se confirman para el otro, los agentes siguen desconfiando tanto de su compañero como de los criminales que pretenden detener. Pero cuando su intento por recuperar millones de un cartel de la droga mexicano se descontrola, Trench y Stigman se ven desacreditados por sus superiores, quienes quieren verlos tras las rejas o muertos según sea el caso.
De esta manera sólo podrán contar él uno con el otro y emplear los trucos aprendidos en su oficio para enfrentar a sus perseguidores.
La película llega a nuestras salas desde este 10 de octubre en un estreno que hará retumbar la cartelera.
Fuente: Melani Salas
